En estos días en que los medios de desinformación masiva y sus terminales políticas han acuñado la expresión “listas manchadas” para referirse a las candidaturas de la izquierda abertzale, en estos días donde el gobierno del PSOE ordena a la Fiscalía que ponga la lupa para que descubra nombres mientras la oposición del PP brama y pide represión para fidelizar su electorado de extrema derecha, conviene recordar las listas manchadas de las que casi nadie parece hablar.
En efecto, tanto el PSOE como el PP presentarán a las elecciones del próximo día 27 de mayo, personas involucradas en casos de corrupción, concejales que han posibilitado o se han beneficiado de pelotazos urbanísticos, gentes que han mirado para otro lado ante delitos flagrantes, pero que irán en las listas de los dos grandes partidos que sustentan y apuntalan lo que ellos llaman el “sistema democrático”.
El tema es tan delicado que el propio diario El País, progubernamental donde los haya, alerta a sus lectores con este significativo editorial: "Los partidos no pasan por su mejor momento en España. Los líderes políticos suelen lamentarse de las opiniones severas de la ciudadanía, que sostiene que los partidos actúan ante todo en provecho de sus intereses."
Naturalmente, existe siempre el riesgo de elevar a categoría los irregulares comportamientos de algunos de sus representantes. Pero aun así, en poco contribuye a limpiar prejuicios el que no sean apartados o expulsados los políticos envueltos en corruptelas. Habrá que ver si la escasa credibilidad de los partidos tiene alguna repercusión en los niveles de participación electoral en las municipales del próximo día 27 y en las generales de marzo de 2008.
Resulta decepcionante y reprobable que cargos públicos implicados en causas judiciales sean candidatos del PP, de CC o del PSOE en los comicios de este mes. De nada han servido las buenas intenciones anunciadas o la elaboración de supuestos códigos de conducta internos. El hecho es que políticos acusados de tráfico de influencias, cohecho, prevaricación, fraude fiscal, malversación de fondos, delitos ecológicos o acosos morales aparecen de nuevo en las listas de voto.
Naturalmente, existe siempre el riesgo de elevar a categoría los irregulares comportamientos de algunos de sus representantes. Pero aun así, en poco contribuye a limpiar prejuicios el que no sean apartados o expulsados los políticos envueltos en corruptelas. Habrá que ver si la escasa credibilidad de los partidos tiene alguna repercusión en los niveles de participación electoral en las municipales del próximo día 27 y en las generales de marzo de 2008.
Resulta decepcionante y reprobable que cargos públicos implicados en causas judiciales sean candidatos del PP, de CC o del PSOE en los comicios de este mes. De nada han servido las buenas intenciones anunciadas o la elaboración de supuestos códigos de conducta internos. El hecho es que políticos acusados de tráfico de influencias, cohecho, prevaricación, fraude fiscal, malversación de fondos, delitos ecológicos o acosos morales aparecen de nuevo en las listas de voto.
En esta lista de candidatos bajo sospecha es el PP quien sobresale, pero eso en nada justifica la actuación del PSOE o CC, que sostiene que la mayor parte de sus casos de irregularidades están ligados a errores administrativos. La tesis de los populares, socialistas y nacionalistas es que los candidatos que repiten en sus listas para los comicios del día 27 tienen derecho a la presunción de inocencia: sólo si fueran finalmente condenados judicialmente o si hubiese pruebas muy evidentes, serían eliminados. Con tal explicación, y debido a la lentitud de la justicia, no pocos de esos cargos podrían continuar ejerciendo su función sin problemas pese al escándalo social que despiertan sus conductas.
Los partidos son muy libres de comportarse así, pero el votante debería castigarles en las urnas para hacerles comprender que "no pueden hacer de su capa un sayo".
Los partidos son muy libres de comportarse así, pero el votante debería castigarles en las urnas para hacerles comprender que "no pueden hacer de su capa un sayo".
MÁS INFORMACIÓN (¡y menos corrupción!): http://fuerteventuralimpia.blogspot.com
y a pesar de tanta inmundicia que ves en el dia a dia de la politica vivida de cerca, sigues, amigo fuerteventuralimpia.blogspot, aficionado a la cosa publica.
ResponderEliminarLo tuyo es fe. Casi casi entrega de martir.
Animo. El latrocinio, pasotismo, incompetencia, chapuceria de los vividores del dinero publico sólo se explica por que somos mayoría los que pasamos del tema y les damos carta blanca para que nos vacilen.
Algo que honra a esta página es la fabulosa maestría para darle una patada en los huevos a los politicuchos con cada artículo que sacan. Bravo
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